LAS PILAS DEL FUTURO

Diversos científicos han desarrollado el prototipo de una batería recargable con luz solar

Ciertamente la elección más ecológica sería no adquirir aparatos que utilicen pilas, pero es tarea imposible en el mundo en el que vivimos. Es por ello que la alternativa más lógica, por ahora, es el reciclaje y las pilas recargables: son contaminantes, pero pueden ser utilizadas hasta 500 veces. Sin embargo, esto puede acabar dentro de algunos años cuando el desarrollo de nuevas tecnologías pueden ser la solución.

http://www.technologyreview.com/read_article.aspx?id=18482

Científicos europeos han desarrollado un prototipo de pila con características muy particulares: pequeño tamaño, flexíbles y recargables con la luz del sol. Se trata de una batería de polímero combinando con una fina capa de célula solar ogánica desarrollada por Konarka Technologies. Este último elemento permite recargarse por sí sola con tan sólo estar expuesta a la luz natural o artificial. Podría ser utilizada en pequeños dispositivos electrónicos como los teléfonos móviles, reporductores mp3, etc. Incluso han señalado algunos coautores del estudio en un artículo publicado en Technology Review que "el prototipo ha sido desarrollado para que siempre cargue en su máxima capacidad independientemente de la intensidad de la luz."

Sin embargo, el ideal de pilas de por vida sigue siendo una meta en el horizonte: la célula solar que permite la autorecarga, no dura más que unas cuantas horas debido a la fotodregadación. El prototipo sólo ha logrado aumentar su vida a unas 3000 horas gracias a una barrera flexible de gas alrededor de la célula lumínica.

Mientras tanto: a la basura no

Las pilas son generadores portátiles que convierten la energía química en eléctrica. En la actualidad se utiliza para todo tipo de dispositivos: desde móviles hasta relojes. El mercado europeo mueve anualmente cerca de 800.000 toneladas (tn) de baterías de automóviles, 190.000 tn de baterías industriales y 160.000 tn de pilas y acumuladores portátiles, según datos de la Comisión Europea. Por esta razón, el Parlamento y el Consejo europeo presentó una nueva normativa más estricta que promueve la recogida y reciclaje de estos productos en la Unión Europea (UE) y donde se señala que todos los Estados miembros tendrán que contar con sistemas de recogida a partir de 2008.

Generalmente, cuando la vida de un pila llega a su fin, estas son tiradas a la basura sin más. Posteriormente, si quedan en los vertederos se oxidan y su recubrimiento se desgasta permitiendo que sustancias como el mercurio se viertan contaminando todo a su alrededor. Otras veces son quemadas con los demás desechos contaminando el aire al desprender elementos tóxicos nocivos para la salud y el ambiente. Incluso se ha optado por enterrarlas sin solucionar el problema. Al tardar mucho tiempo en desintegrase, las pilas emanan sustancias peligrosas que contaminan el suelo, las bacterias y el agua subterránea. Un ejemplo es el mercurio que puede ocasionar daños en el sistema nervioso, fallas renales, trastornos gastrointestinales, y de acuerdo con la dimesión de su ingestión, hasta la muerte.

Para evitar estos daños o similares, es indispensable un procesamiento especial del material. En algunas paradas de autobuses existen depósitos de pilas. Incluso algunas organizaciones llevan a cabo recogidas de pilas hasta las plantas de tratamiento. Este sistema evita que los productos químicos contaminen y, por otra parte, en algunos casos se consigue la reinserción de recursos escasos en la naturaleza en la industria.

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